ELEMENTO | ERROR | SÍ | NO |
Dicción | Omití letras |
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Aumenté letras |
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Cambié palabras |
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Omití palabras |
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Agregué palabras |
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Entonación | Errores de acentuación:
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Intensidad | Volumen bajo (casi no se escucha la voz) |
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Subí y/o bajé la intensidad sin motivo aparente |
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Volumen adecuado (se escuchó perfectamente) |
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Volumen muy alto (en lugar de hablar, grité) |
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Fluidez | Omití el punto y seguido y/o el punto y aparte |
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Omití la coma |
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Omití los dos puntos |
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Fragmenté la lectura sin motivo alguno |
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sábado, 27 de noviembre de 2010
LISTA DE COTEJO PARA EVALUAR LA LECTURA EN VOZ ALTA
lunes, 8 de noviembre de 2010
TAREA - FIGURAS LITERARIAS BARROCAS
"Ocúlteme, admirado,
en un sauce de hiedras coronado,
y en tan duros enojos,
mi corazón fue imán, norte de sus ojos,
su beldad admirando;
y a penas me aparté del agua cuando
ella al cristal undoso,
-bajel de hielo-
entrega su hermosura,
y amor artificioso
en las ondas procura,
viendo sus ojos ciego,
violar el agua con lasquo fuego."
(Agustín de Salazar y Torres)
Imprimir el poema y subrayar cuatro figuras literarias vistas en clase (escribir el nombre de la figura junto al ejemplo).
sábado, 6 de noviembre de 2010
SOR JUANA
Hombres necios que acusáis
a la mujer sin razón,
sin ver que sois la ocasión
de lo mismo que culpáis.
Si con ansia sin igual
solicitáis su desdén,
¿por qué queréis que obren bien
si las incitáis al mal?
Combatís su resistencia
y luego con gravedad
decís que fue liviandad
lo que hizo la diligencia.
Parecer quiere el denuedo
de vuestro parecer loco
al niño que pone el coco
y luego le tiene miedo.
Queréis con presunción necia
hallar a la que buscáis,
para pretendida, Tais,
y en la posesión, Lucrecia.
¿Qué humor puede ser más raro
que el que, falto de consejo,
él mismo empaña el espejo
y siente que no esté claro?
Con el favor y el desdén
tenéis condición igual,
quejándoos, si os tratan mal,
burlándoos, si os quieren bien.
Opinión ninguna gana,
pues la que más se recata,
si no os admite, es ingrata,
y si os admite, es liviana.
Siempre tan necios andáis
que con desigual nivel
a una culpáis por cruel
y a otra por fácil culpáis.
¿Pues cómo ha de estar templada
la que vuestro amor pretende,
si la que es ingrata ofende
y la que es fácil enfada?
Mas entre el enfado y pena
que vuestro gusto refiere,
bien haya la que no os quiere
y queja enhorabuena.
Dan vuestras amantes penas
a sus libertades alas
y después de hacerlas malas
las queréis hallar muy buenas.
¿Cuál mayor culpa ha tenido
en una pasión errada:
la que cae de rogada
o el que ruega de caído?
¿O cuál es más de culpar,
aunque cualquiera mal haga:
la que peca por la paga
o el que paga por pecar?
¿Pues para qué os espantáis
de la culpa que tenéis?
Queredlas cual las hacéis
o hacedlas cual las buscáis.
Dejad de solicitar
y después con más razón
acusaréis la afición
de la que os fuere a rogar.
Bien con muchas armas fundo
que lidia vuestra arrogancia,
pues en promesa e instancia
juntáis diablo, carne y mundo
martes, 26 de octubre de 2010
TEATRO EVANGELISTA
Cuando los misioneros se dieron cuenta de que los pueblos americanos tenían una larga tradición de representaciones ancestrales, aprovecharon este gusto por el espectáculo para poner piezas sencillas apoyadas con algunos efectos de tramoya (fuegos artificiales, explosiones, olores de azufre, etc.) y aunque no había muchos diálogos, sino palabras aisaldas y sonidos, ésto no fue un impedimento para que tuvieran tanto éxito estas representaciones.
La primera obra que presentaron los misionesros en tierras americanas fue EL AUTO DEL FIN DEL MUNDO, en la que participaron tanto frailes como indígenas. En esta obra se hablaba de Lucía, una mujer muy católica pero que había sido infiel a su marido; cuando muere, Dios la castiga por su grave pecado y la manda al infierno con Satanás. Esta obra tenía la intención de que los indígenas comenzaran a abandonar la costumbre de la poligamia que tenían tan arraigada.
Otros evangelizadores fueron los jesuitas, quienes llegaron a tierras americanas en 1572; supuestamente, su misión era convertir a los naturales, pero en realidad querían dedicarse a la educación de los criollos y fundar un círculo de minfluencia política, social y económica. Su éxito en otras partes del mundo se basaba en sus grandes enseñanzas y representaciones teatrales, las cuales no se hacían en la calle, ni para todo el pueblo, sino en lugares como El Colegio de San Pedro y San Pablo, en los que se instauró un teatro culto, escolar, muchas veces escrito en latín y muy clasicista. La obra de teatro más famosa de los jesuitas fue EL TRIUNFO DE LOS SANTOS, en la que se enaltecían las virtudes del bautizo y la ingtervención de los santos para vencer la idolatría.